Después de unas primarias concurridas en mayo, los residentes de Kensington finalmente pudieron emitir sus votos el martes en las históricas elecciones generales de 2023 en Filadelfia.
El centésimo puesto de alcaldía fue para Cherelle Parker, la primera mujer - y mujer negra - elegida alcaldesa de Filadelfia. El Partido de las Familias Trabajadoras también desplazó a los republicanos como minoría en el Consejo de la Ciudad.
Mientras tanto, la concejala del Distrito 7, Quetcy Lozada, que sirve a la mayor parte de Kensington y recientemente ha celebrado varias audiencias públicas sobre la calidad de vida en el vecindario, aseguró un mandato de cuatro años. Lozada se postuló sin oposición.
A lo largo del día, los votantes de Kensington enfatizaron las cuestiones de calidad de vida como la fuerza impulsora detrás de sus votos.
Después de votar en la escuela secundaria Mastbaum, Howard Leighton citó el crimen como su principal preocupación. Leighton, que ha votado durante tres décadas, dijo que su hija trabaja para un Dollar Tree local, que experimenta robos “casi todos los días”.
“Simplemente voto por el cambio”, dijo Leighton. “Dicen: ‘Queremos un cambio’. Tenemos que votar por él. Si no votamos por él, no podemos lograr cambios”.
Otros votantes compartieron preocupaciones similares.
Para Christina Valentín, el crimen era una preocupación primaria. Valentín, que vive cerca de McPherson Square, también expresó esperanza por un cambio que aborde la falta de vivienda, la venta de drogas y el cierre de negocios locales.
“Tenemos que hacer todo lo posible para comprar productos y cosas necesarias, cosas diarias”, dijo Valentín. “...Los negocios están cerrando. No quieren lidiar con el drama, así que prefieren cerrar y abrir en otro lugar. Perdimos nuestro Walgreens. Perdimos nuestro Rite Aid. Perdimos muchos negocios después de COVID”.
Gregory Shaub dijo que se centró en la carrera por la alcaldía y múltiples cuestiones sociales influyeron por quién votó. La seguridad, dijo Shaub - específicamente la autonomía corporal - era una preocupación principal.
“Soy queer, así que no quiero terminar en un campo de concentración”, dijo Shaub. “Quiero seguir manteniendo la ciudad segura para los inmigrantes”.
Mientras los votantes enfatizaron sus motivaciones para votar, también repetían el sentimiento de que otros residentes en Kensington, que tiene los distritos con la participación electoral más baja de la ciudad, no votan porque no creen que votar tenga impacto.
Pero Veronica Rex, residente de Kensington, dijo que cree que votar es la mejor manera de ejercer su voz.
“La gente no se presenta porque todavía no comprende la importancia de votar”, dijo Rex. “Mucha gente siente que su voto no importa o que las cosas van a seguir igual. Sin embargo, podemos hacer una diferencia o cambio. Tenemos que cambiar la narrativa".
Saliendo de las urnas con una pegatina que decía “Yo voté” en su abrigo, Rex se fue con una última palabra.
“Para cambiar la narrativa, la gente tiene que empezar a salir a votar para hacer ese cambio”, dijo Rex.
Esta historia es parte de Every Voice, Every Vote, un proyecto colaborativo gestionado por el Instituto Lenfest de Periodismo. El apoyo principal lo proporciona la Fundación William Penn con financiación adicional del Instituto Lenfest, Peter y Judy Leone, la Fundación John S. y James L. Knight, Harriet y Larry Weiss y la Fundación Wyncote, entre otros. Para obtener más información sobre el proyecto y ver una lista completa de quienes lo apoyan, visite www.everyvoice-everyvote.org. El contenido editorial se crea independientemente de los donantes del proyecto.
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