Nota de la editora: Este artículo se publicó originalmente en inglés por Jack Tomczuk para Metro Philadelphia. Fue traducido por Cristina Paulino y editado por Gabriela Rivera para Kensington Voice.
Los restaurantes de Filadelfia pueden abrir sus puertas a los clientes, por primera vez en casi seis meses.
La prohibición de la ciudad de comer en comedores interiores se levantó el martes, el mismo día en que el gobernador Tom Wolf anunció que los restaurantes podrán ampliar su capacidad a finales de este mes.
Los restaurantes en la ciudad y a través de Pensilvania actualmente pueden reabrir sus comedores interiores al 25 % de su capacidad y este número aumentará al 50 % el 21 de septiembre, dijo Wolf.
El comisionado de salud, Thomas Farley, dijo que los funcionarios aún están revisando el cambio y aún no han tomado una decisión sobre si la política se implementará en Filadelfia. La ciudad ha tendido a imponer protocolos COVID-19 más estrictos que el estado.
“Los restaurantes de Filadelfia no deben asumir que simplemente seguiremos el cambio del gobernador aquí en la ciudad”, dijo Farley en una conferencia de prensa.
Por ahora, los gerentes deben cumplir con una serie de protocolos, incluyendo dejar espacios entre las mesas para que los comensales estén separados por al menos 6 pies; limitar las mesas a un máximo de cuatro personas; y servir alcohol sólo cuando se ordena una comida.
Además, los meseros deben usar máscaras y protectores faciales, y los restaurantes deben cerrar a medianoche, con una última llamada a las 11 p.m.
Farley dijo que el personal del departamento de salud visitará los restaurantes para educar a los gerentes sobre las reglas y que los inspectores harán cumplir los protocolos.
“Espero que esto, al menos de alguna manera pequeña, comience a aliviar el impacto económico en nuestra gran industria de restaurantes”, dijo el alcalde Jim Kenney, quien recibió críticas a finales del mes pasado después de ser fotografiado comiendo dentro de un restaurante en Maryland.
La Autoridad de Estacionamiento de Filadelfia comenzó a ofrecer un trato especial el martes en seis de sus garajes en el centro de la ciudad para alentar a los residentes a visitar los restaurantes locales.
Los conductores pueden utilizar los garajes hasta por cuatro horas a una tarifa fija de $ 7 después de las 5 p.m. La oferta expira el 30 de noviembre.
Las autoridades reportaron 43 casos adicionales de coronavirus en Filadelfia el martes y no hubo nuevas muertes.
El promedio semanal es de 109 casos nuevos al día, aproximadamente a la par con los 108 de la semana anterior. La tasa de pruebas positivas aumentó ligeramente, hasta el 4.2 %.
Farley dijo que el brote en la Universidad de Temple, que llevó a los líderes escolares a suspender las clases presenciales, está disminuyendo. Aproximadamente 150 estudiantes fueron evaluados cada día durante el fin de semana del Día del Trabajo, y menos dieron positivo, dijo.
“Hasta ahora no hay evidencia de propagación de parte de la población de la Universidad de Temple a otras poblaciones de la ciudad”, agregó Farley. “Eso es muy bueno”.
Según los datos proporcionados por la universidad, el martes por la tarde había 283 casos activos de COVID-19 en Temple.
En otras noticias relacionadas con el coronavirus, la ciudad abrió el martes su primera ronda de Centros de Acceso, lugares donde los padres que trabajan pueden dejar a sus hijos para el aprendizaje en línea supervisado.
Se requiere inscripción y, hasta ahora, más de 600 familias se han inscrito en el programa gratuito. Hay 31 centros, en su mayoría centros de recreación y bibliotecas, operando ahora, con planes de abrir 46 más el 21 de septiembre.
La vicealcaldesa Cynthia Figueroa dijo que la primera fase está completa. Los padres y cuidadores aún tienen tiempo para inscribirse en la segunda ronda, pero los funcionarios esperan que la inscripción esté completa para el final de la semana.
Se da prioridad a los padres que trabajan y que no pueden pagar el cuidado de sus hijos. Para obtener más información, visite www.phila.gov/accesscenters.
Algunas personas que reciben beneficios de desempleo en Pensilvania notarán unos extra $ 300 a la semana el lunes, dijeron los funcionarios estatales.
El programa, llamado Asistencia por Salarios Perdidos, está abierto a cualquier persona que esté desempleada o subempleada debido a la pandemia de coronavirus. Las personas que ya reciben beneficios pueden ir a www.uc.pa.gov/cert, iniciar sesión y hacer clic en “completar la certificación LWA”.
Los pagos se distribuirán con carácter retroactivamente al 1 de agosto y aquellos que reciben beneficios recibirán una suma global para las últimas semanas.
El programa se extenderá hasta diciembre o hasta que se gaste la asignación federal de $ 1.5 mil millones de Pensilvania. LWA fue establecida por el presidente Donald Trump después de un beneficio anterior, que proporcionaba $ 600 adicionales a la semana y expiró en julio.
Traductora: Cristina Paulino / Editora: Zari Tarazona / Diseñador: Henry Savage
Kensington Voice es una de las más de 20 organizaciones de noticias que producen Broke in Philly, un proyecto colaborativo de reportaje sobre mobilidad económica. Lea más en brokeinphilly.org o sígalo en Twitter en @BrokeInPhilly.