Nota de la editora: Este artículo se publicó originalmente en inglés por NBC10 Staff para NBC10. Fue traducido por Solmaira Valerio y editado por Gabriela Rivera para Kensington Voice.
Filadelfia ahora tiene un plazo para la reapertura, ya que el gobernador Tom Wolf anunció el viernes que los 18 condados de Pensilvania que aún están bajo el más estricto bloque de la respuesta del coronavirus pasarán de rojo a amarillo para el 5 de junio.
La ciudad, junto con los condados de Bucks, Chester, Delaware y Montgomery, se unirán a los otros 49 condados del estado que ya han restaurado más negocios y servicios bajo la fase amarilla de la reapertura estatal.
Ocho condados pasarán a la fase amarilla para el 29 de mayo: Dauphin, Franklin, Huntingdon, Lebanon, Luzerne, Monroe, Pike y Schuylkill. Los 10 condados restantes pasarán a la fase amarilla el 5 de junio.
Wolf también anunció 17 condados en otras partes del estado que podrán pasar a la fase verde para el 29 de mayo. Esos condados son Bradford, Cameron, Clarion, Clearfield, Crawford, Elk, Forest, Jefferson, Lawrence, McKean, Montour, Potter , Snyder, Sullivan, Tioga, Venango y Warren.
La fase amarilla del plan de reapertura aún requiere “mitigación agresiva”. Quedan prohibidas las reuniones de más de 25 personas y los gimnasios, casinos, teatros y otros lugares de recreación, bienestar y entretenimiento bajo techo permanecerán cerrados. Los restaurantes y bares están limitados a ofrecer comida pedida para llevar o entrega, y las empresas deben seguir las pautas federales y estatales para el distanciamiento social y la limpieza.
La fase amarilla permite a los negocios minoristas llevar a cabo operaciones en persona, pero las opciones de recogida y entrega en la acera son “preferibles”.
Además, Wolf dijo el viernes que los condados “amarillos” podrán operar campamentos de verano, aunque deben desarrollar planes de salud que cumplan con las directrices de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. El personal de los campamentos también deben usar cubiertas faciales, de acuerdo con las pautas de Wolf, y aunque los niños no están obligados a hacerlo, se recomienda que también se cubran la cara.
La parte sureste del estado ha sido la región más afectada por el nuevo coronavirus. El viernes, los condados de Filadelfia, Bucks, Chester, Delaware y Montgomery habían reportado acumulativamente al menos 2,966 muertes y 40,409 casos confirmados de COVID-19, la enfermedad causada por el virus.
El plan de reapertura del estado ha pedido que cualquier condado en particular reporte 50 nuevos casos al día por cada 100,000 residentes durante un período de 14 días.
Aunque la tasa de infección ha disminuido, Filadelfia, el área metropolitana más grande de la región, sigue promediando más de 50 casos nuevos al día. El viernes se reportaron 309 nuevas infecciones y 56 nuevas muertes.
“No estoy seguro de por qué se fijó el 50 por 100,000. Ese fue uno de los muchos factores”, dijo Wolf el viernes. Dijo que la capacidad de pruebas ha aumentado, lo que ha aliviado las preocupaciones acerca de depender estrictamente de los recuentos de casos.
Del mismo modo, el condado de Delaware está promediando un poco más de 116 nuevos casos diarios.
Wolf, un demócrata, ha estado enfrentado una creciente presión para reabrir todos los condados.
A principios de la semana, el comisionado de salud de Filadelfia, el Dr. Thomas Farley, advirtió que la gente tendrá que adaptarse a una nueva forma de hacer las cosas, incluso cuando la ciudad y el estado progresen en su lucha contra el virus. Usar máscaras, dijo, tendrá que convertirse en “comportamiento normal y esperado”.
“Si aún no lo ha hecho, consiga una máscara y acostúmbrese a usarla”, dijo Farley.
Traductora: Solmaira Valerio / Editora: Gabriela Rivera / Diseñador: Henry Savage
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